Parece que te aprieto el corazón,
que te soy pared, y te soy la espada,
que te quedas con el pecho dislocado;
parece que de amor no entiendo nada.
Parece que te estoy pisando
y te deshago en afiladas penas,
parece que soy ese que te arranca
y desfibrila sin amor tus venas.
Parece que no siento nada
Parece que no hay más salida.
Parece que te estrujo el alma.
Te estoy salvando la vida.