Nunca estuvimos tan cerca

Años despues
salí al patio a colgar la ropa
y miré al cielo.
Azul a pesar de todo...
El cielo también me miró
me vio tan lejos
tan poco, tan nada
que me quiso encender con su brisa
y me quiso arrancar del silencio.
Le entregué mi soledad de nuevo
pero esta vez
le dejé ser mi dueño para siempre,
me mordí los ojos con los parpados,
tragué todo el aire que me rodeaba
y nunca estuvimos tan cerca.